En una reciente visita a la capital de Escocia hemos descubierto un lugar nuevo pensado por y para los más pequeños de la casa. El Museo Nacional de Escocia en Edimburgo ha sido recientemente renovado con el objetivo de convertirlo en un espacio de entretenimiento para públicos de todas las edades. Este museo sigue la tendencia, presente ya en otros museos del mundo, de acercar la cultura a los niños y niñas a través del juego y la estimulación.
La parte más antigua del museo sigue dedicada a la historia de Escocia mientras la parte nueva es una mezcla de museo etnológico y museo de ciencias naturales invadido por gran cantidad de espacios dedicados a los niños y niñas donde a través de multitud de juegos interactivos se les acerca a la ciencia, la historia, el arte y las culturas de otros países.
El museo cuenta con el espacio Connect con juegos para niños sobre robótica, aeronáutica, física y la famosa oveja Dolly disecada ; el espacio Earth in Space sobre las expediciones al espacio o el espacio Imagine para que los más pequeños jueguen a mover un dragón chino, disfrazarse, componer música dando un paseo o representar una obra de teatro con sombras chinescas.
Al final del recorrido os recomendamos visitar su terraza en la planta séptima para
disfrutar de una excepcional vista de la ciudad y su imponente castillo.

El Museo Nacional de Escocia es un lugar muy recomendable para las familias que visitan Edimburgo y un lugar imprescindible en días de lluvia o frio.

El Museo Nacional de Escocia es un lugar muy recomendable para las familias que visitan Edimburgo y un lugar imprescindible en días de lluvia o frio.
Además es uno de los pocos lugares
de interés turístico totalmente gratuitos. Aprovechadlo.